Durante un procedimiento de abdominoplastia, la piel se separa de la fascia que cubre los músculos y luego se tira hacia abajo para eliminar su exceso.

Al elevar la piel, se crea un gran espacio entre la superficie inferior de la piel y el músculo debajo.

Desde el punto de vista quirúrgico, queremos que la conexión entre la piel y el músculo se restablezca lo antes posible para evitar la acumulación de líquido y secreciones. Si esto llegara a pasar, dará lugar a la formación de cicatrices y aumenta la posibilidad de infección.

Para prevenir esto, se emplean tres medidas:

1- La piel se sutura de nuevo a la fascia muscular debajo.

2- Se utiliza vendaje grueso y  una prenda de presión, lo cual mantendrán la piel en contacto con los músculos debajo.

3- Se colocan drenajes para aspirar el líquido que se genera naturalmente después de la cirugía, evitando así la acumulacion de líquido.

Algunos cirujanos presionan para eliminar el uso de drenajes. La discusión nunca se refiere a ningún efecto negativo de usar drenajes. No utilizar drenajes se utiliza con fines de mercadeo. No hablaré de los detalles de la controversia.

Quito los drenajes cuatro días después de la cirugía. Los drenajes me permiten bajar mi incisión donde están los vasos linfáticos y me protegen de la acumulación de líquido. Para mí, los drenajes actúan como una medida de seguridad. En más de 30 años de práctica, nunca me he arrepentido de usarlos.